La ruta imperial que une la localidad leonesa de Astorga, atraviesa el Sur de Galicia y llega hasta Braga (Portugal) todavía conserva en ruinas parte del esplendor que los romanos eran capaces de dar a lo que construían. La construcción de la Vía Nova se remonta al siglo I después de Cristo y su trazado es de 300 kilómetros. A día de hoy todavía se conservan 286 miliarios (columnas de piedra que marcaban las millas), cinco puentes (un número muy elevado si se tiene en cuenta que en la Hispania romana sólo se conservan 30), las antiguas minas de oro que se explotaban en la época -las Médulas en León y Os Milagres de Monte Medo y Os Biocos, ambas en Ourense- y 10 mansiones, entre ellas Aquis Ogeresibus y Aquis Querquennis en Lobios y Bande respectivamente; esta última ofrece en la actualidad el conjunto de ruinas romanas más importante de Galicia, después de la muralla de Lugo.
La última oportunidad de una ruta imperial con 2000 años de antigüedad – .elmundo.es – 19/06/2013